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introducción

hay un escrito llamado "el principio del fin" si estas interesado en mi libro te recomiendo leerla, ya que es la un pequeño texto ...

sábado, 28 de abril de 2018

capítulo 3


confianza 

Al despertar vi a Sebastián analizar mi arco, después violas flechas y note que por último miro mi aljaba, trate de ser discreto.
- valla ¿fuiste deserrado se una forma muy cruel verdad? - susurró mientras parecía algo nostálgico.
Tomo el arco y puso su mochila en el piso se colocó la aljaba con las tres flechas en la espalda y en seguida emprendió camino perdiéndose entre los arboles cercanos.
Me levanto pensando por qué habrá dejado su mochila, la analizo y veo que tiene un pequeño dibujo una especie de símbolo, estoy seguro de no haber visto algo como eso, veo que aun hay madera entonces las coloco para hacer otra fogata, abro la mochila, aunque me angustia ver lo que hay en si interior, al abrirla me llevo una sorpresa tremenda, no había nada de especial, solo un par de manzanas mas y lo que parecen ser arándanos, un pequeño cuchillo y… ¿un mechero?, es raro pensar que se puedan mantener cosas así sin embargo no me quejo, tomo una vara delgada la cual se prende rápido, la coloco en medio de los trozos de madera.
Sonrió pensando en lo hermoso que resultan pequeños momentos de felicidad, aunque son efímeros sacan sonrisas verdaderas.
Guardo el mechero en la mochila, cierro esta al tiempo que siento una mano helada en mi hombro, un escalofrió recorre mi espalda, pienso que tal vez es mi imaginación, pero, se que hay alguien detrás de mí, pero que raro si hubiera alguien el sonido de la hierba seca de alrededor lo hubiera delatado.
- ¿podrían ser los guardias que saben que estoy vivo y buscan matarme? - pienso mientras pierdo control mis latidos.
me giro y en un intento desesperado sujeto aquella mano cierro los ojos, estoy a punto de soltar un golpe, pero antes de siquiera lanzarlo siento un golpe en la mequilla, caigo al suelo y no puedo alzar la mirada, sin embargo, pareciera que me golpearon con algo blando.
- perdón por eso, pero tu atacaste primero, ¿estas bien? -
Alzo la mirada, y noto que Sebastián me lo dice en un tono burlón.
- ya perdóname, no me mires tan raro- me dice a la par mientras sonríe.
- perdón es solo que no te escuche acercarte y… -
- ¿eres bastante miedoso verdad? - pregunta mientras extiende su mano para levantarme.
- sí, jamás he sido muy valiente, siempre me molestaba y parezco un saco de papas al que golpear- respondo pensando que tengo que analizar más antes de actuar.
- yo te protegeré y te ayudaré, no te tienes que preocupar-
- ¿Por qué me ayudas así de la nada? -
- la verdad… me recuerdas mucho a mi hermano - responde desviando la mirada
- ¿Dónde está él? -
- el… murió, me salvo, hicimos la prueba juntos ya que nacimos el mismo día, mi hermano es normal, pero yo Sali con una distorsión clase 1, del distrito donde vengo primero disparan y después destierran, el recibió las balas por mí, y caímos juntos -
¿balas? En donde yo estaba usaban flechas, no entiendo el porqué, pero parece que a él también lo tiraron por un precipicio.
- cuando desperté me di cuenta que mi hermano estaba debajo de mí, ya era muy tarde como para hacer algo, solo lo enterré, por lo menos quería ver que mi hermano tuviera un entierro digno - lo dijo con la voz entrecortada.
- Lo siento por tu perdida - lo dije agachando la cabeza 
- esta bien fue hace un tiempo, en un mundo como este no hay espacio para preocuparse por la muerte, en vez de eso yo creo que hay que vivir a nuestro gusto, para morir con una sonrisa y sin arrepentimiento- responde sonriendo desvía la mira al cielo.
Empezamos a preparar todo para cocinar, mientras tanto, a mi mente llegan mis familiares, aunque mi padre siempre estaba ausente a excepción de mi madre, la cual podíamos ver una o dos veces al año, ambos trabajaban en el gobierno, pienso en mi hermano, el esta limpio, pero… ¿porque yo no?
Sebastián deja el conejo sostenido en una especie de asador improvisado echo con varias ramas de madera; necesito respuestas, tengo fe en que Sebastián me diga lo que sabe.
- Sebas…-
- ¿quieres respuestas verdad? - me interrumpe sonriendo - pues … pregunta -
- ¿que son los distritos? ¿de qué distrito vienes? ¿Qué son las distorsiones y porque destierran a los que las tienen? ¿Por qué el resto de la tierra esta desolada? ¿Por qué hay distritos? También me pregunto como llegaste sin hacer ruido y …-
- ¡Hey! tranquilo una pregunta a la vez; las responderé todas, pero poco a poco ¿ok? - me interrumpe sonriendo.
Es extraño … el me inspira confianza, supongo que… es mi primer amigo…

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